MARIANO GARCIA, AMIGO... HASTA SIEMPRE

Miércoles 12 de septiembre de 2012. Son aproximadamente las diez y media de la noche, y estamos en la redacción de www.mariskalrock.com, subiendo noticias a la web, escribiendo artículos y reportajes para la Heavy, en fin, la tarea habitual de siempre, Mariscal Romero y yo, hoy más tarde lo normal por la acumulación de trabajo que tenemos desde que estamos sacando la Heavy a modo de cooperativa laboral/editorial. Cuando estaba ya apagando mi ordenador y recogiendo para irme a casa, escucho desde el despacho de Mariscal una conversación por teléfono, que por el tono y los comentarios de Mariscal, sospecho que no son en absoluto buenas noticias.
 En efecto, a los pocos minutos, Mariscal, visiblemente afectado me dice: "Mariano, me acaba de llamar Pedro Guzmán, y me asegura que Mariano García ha muerto."

 Me quedo literalmente helado. Le pregunto: "Pero... ¿como ha sucedido? ¿cuando?

Mariscal me explica que por lo visto, el paro cardiaco que ha acabado con su vida le sobrevino hacía casi dos semanas, y que ante su desaparición, su familia se vio obligada a forzar la entrada en la casa que Mariano tenía en Cercedilla, en las cercanías de Madrid, donde encontraron su cuerpo sin vida. De inmediato telefoneo a Victor, su sobrino, y él me confirma la trágica noticia. En efecto, Mariano ha muerto.

 Os aseguro que todavía hoy, unos días después, al recordar esa conversación con Victor, me estremezco y no puedo evitar que se me haga un nudo en la garganta.  Apenas puedo creer que alguien como Mariano García, que era vitalista al máximo, un hombre inquieto, hiperactivo, entusiasta, siempre metido en mil charcos, a pesar de que yo sabía que estaba pasando una mala racha, se haya ido para siempre.

 Tanto en mis programas de radio, como en los que ha hecho Mariscal Romero, incluido un programa especial en el que intervino su viejo compañero de mil andanzas, el Pirata, hemos recordado todo lo que Mariano García fue en el rock español, y más en concreto en el rock en Madrid. Por supuesto, su apotación más decisiva, y por la que será recordado, sin duda fue su programa de radio, el ya mítico  Disco Cross, pero junto a su trabajo en la radio, en prensa además de ser colaborador habitual de Popular 1 y Heavy Rock, dirigió la edición española de la revista inglesa Rock Power entre 1991 y 1994, era el programador y animador principal del templo del Heavy Metal en Madrid durante los años 80, Canciller, dirigió el sello discográfico Barrabás, bajo el cual grabaron durante los años que estuvo activo grupos como Ñu, Porretas, Boikot, Leize y otros muchos más, y desde 2003 a 2009, consiguió hacer realidad, al menos a nivel Madrid, lo que ha sido el sueño de todos los que nos hemos dedicado a la radio rock en este país: poner en marcha una emisora como Rockservatorio FM, una emisora de radio dedicada a programar rock 24 horas al dia, y de cuyo staff yo formé parte en el último tramo de su estancia en el dial.

 Yo comencé a escuchar Disco Cross a principios de 1983 en Radiocadena Madrid FM, aquella maravillosa estación de radio cercana, plural, joven, rockera y comunicativa como ninguna otra ha vuelto a existir, que emitía desde aquel destartalado chalet que se ubicaba en el patio interior de un bloque de viviendas situado en la calle Diego de León 47. Algún día escribiré un amplio blog acerca de aquella legendaria emisora, a la que yo me escapaba siempre que podía para ver como se hacían en directo los legendarios programas de Mario de Castro, de Paco Pérez Bryan con El Búho Musical, Javier Diez, años después director de Radio 3 con su En Concierto... y `por supuesto, de 2 a 4 de la tarde, el Disco Cross de Mariano García, con sus inseparables Jesús y Antonio.

 En aquellos años 80 en los que todo estaba explotando en España, en los que mi generación era la primera que vivía una juventud en libertad y fuera de las ataduras del franquismo, programas como Disco Cross nos dieron a conocer, junto a los del Mariscal Romero, el Pirata o el Búho, toda aquella explosión de rock que se daba tanto en España con Barón Rojo, Leño, Obús, Barricada, Panzer, Banzai, Santa y mil más, como lo que nos venía de fuera: Judas Priest, Iron Maiden, Motörhead, AC/DC, Metallica, Manowar... Y todos los que me conocen lo saben: Disco Cross fue uno de los programas de radio que influyó en esos años de adolescencia en mi personalidad,  en mi carácter, y sobre todo, en mi vocación de llegar a dedicarme a la radio rock, a poder llegar a hacer ese tipo de programas, como el que llevo haciendo desde 1995 con Rock Star.

 Incluso os confieso algo más personal. En aquellos años, con 14. 15 o 16 años, todos vivimos en mayor o menor medida, sobre todo los que tenemos una personalidad no acomodaticia, inconformista, rebelde, los inevitables momentos de frustración, de soledad, de enfrentamiento con la autoridad de los padres, del colegio, la incomunicación con un ambiente que no te acepta como eres... en muchos de esos días de broncas, de soledad, de estar rodeado de esa hostilidad, muchas, muchísimas veces, no solo  ya la música, sino esa forma desenfadada, divertida, aconvencional, con ese gracejo barriobajero y ese buen humor que Mariano García tenía cuando hacía radio, lo que me hacía sentirme mejor, sentirme cómplice de una forma de ser y de una música que reflejaba esa manera de ser y de sentir, y me arrancaba no solo sonrisas, sino carcajadas.

 Años después, cuando empecé a trabajar en el periodismo musical, le conocí en persona y siempre tuve una excelente relación personal con él. Tuvimos una amistad muy cómplice y una gran confianza mutua,que me permitió conocer parte del gran drama personal que vivió en estos últimos año, al igual que él tambien conoció mis malos momentos. Siempre recordaré aquellos viajes a Londres, a Alemania, para hacer entrevistas a grupos o a ver festivales, y lo que nos podíamos llegar a reír con las ocurrencias y disparates que decía o hacía. Y si encima se juntaba con nosotros el Pirata, aquello era ya la revolución...

 No es menos cierto que Mariano García, y esto lo he dicho también en mis programas de radio, como todos, como cualquiera de nosotros, tuvo sus luces y sus sombras. Soy consciente de que en más de una vez se ganó la enemistad con músicos, periodistas y/o más gente del rock business que no estaba de acuerdo con su forma de trabajar. Seguramente, cometió errores y sobre todo, por desgracia una serie de problemas personales que se le hicieron muy difíciles de sobrellevar le llevaron a una situación anímica que hizo que sus últimos tiempos en Rockservatorio FM no fueran en absoluto brillantes y yo en particular, los recuerde de forma muy amarga. Reflexionando sobre como y porque Mariano ha muerto, pienso que ese cúmulo de problemas puedan haber tenido mucho que ver en su final.

 Pero por encima de todo, yo hoy quiero recordar, y recordaré siempre a ese Mariano García inquieto, liante, que entraba en un bar y era capaz de hacer reír a una maceta, que nos vacilaba a todo el mundo, que me descubrió música fabulosa en los buenos tiempos de Disco Cross, y del que siempre me admiró ese talante decidido, emprendedor, vitalista... Por encima de otros posibles puntos oscuros de su trayectoria, creo que el rock español siempre le debera mucho, y sobre todo, le deberá -y yo le tendré siempre- un recuerdo cariñoso, afectivo y respetuoso.

Os dejo una foto en la que estamos juntos en un concierto de Bruce Dickinson, The Almighty y Skin   en Toulon, Francia, en septiembre de 1994 el Pirata, quien suscribe estas líneas, Maite Nuñez de EMI y Mariano, en una de esas poses suyas de cachondeo , señalándose el corazón. Estábamos en el backstage del concierto y el ambiente era estupendo. ¡Que tiempos...!

Mariano, querido amigo, maestro... Siempre te recordaré y siempre reivindicaré aquel Disco Cross como un autentico patrimonio de la historia de la radio rock en  España.

Hasta siempre, tocayo...