-Comandante Fidel Castro, Diario Granma, 1 de mayo de 2008
"Europa camina hacia el incremento de la jornada laboral, nuevas formas de precariedad y flexibilidad laboral de millones de trabajadores y trabajadoras europeas. No nos resignamos, sin embargo, a este modelo basado en las leyes del mercado y seguimos empeñando nuestros esfuerzos por una Europa de progreso económico y social, de cooperación y de paz."
Manifiesto ante el 1º de mayo, Comité Federal del Partido Comunista de España
Desde hace ya más de un siglo, en todo el mundo se celebra la fecha del 1 de mayo como el dia internacional de los trabajadores, según se acordó en en París en el Congreso Socialista Obrero de la II Internacional en 1889, en recuerdo y homenaje a los mártires de Chicago, el grupo de sindicalistas condenados a muerte y ejecutados por su participación en la huelga del 1 de mayo de 1886 en reivindicación de la jornada laboral de ocho horas, que fueron detenidos tres días mas tarde, en el enfrentamiento con la policía de Chicago en la llamada Revuelta de Haymarket.
Considero muy importante recordar esta fecha y el origen de su carácter festivo, porque en medio de esta vorágine de desinformación y trivialización que padecemos, el 1 de mayo parece haber quedado relegado a un "puente" más, en el que todo aquel que se lo puede permitir, lo que hace es escapar de la ciudad, aunque sea a costa de pasar seis horas atascado en una retención a la salida de Madrid o Barcelona, -cosa lógica, por suspuesto- pero quizá sin saber en muchos casos, que tal fiesta no es solo el reclamo publicitario de una agencia de viajes, sino que se trata de una importante conquista histórica del movimiento obrero, cuya celebración incluso en la historia más reciente de España no ha dejado de tener tintes trágicos. Tres de los últimos combatientes antifascistas asesinados por el franquismo pertenecientes al PCE (m-l) y al FRAP en los fusilamientos de septiembre de 1975, fueron acusados entre otros "delitos", de promover una manifestación clandestina no autorizada del 1º de mayo en 1973 en defensa de la libertad sindical y contra la dictadura.


Tan solo dos reflexiones que me gustaría compartir con todos vosotros. Cada año, el discurso tanto de los líderes de UGT como de CCOO nunca va más allá -este año no fué una excepción, al menos en la manifestación de Madrid- de lo parcial, de la coyuntura del momento, de los salarios, los precios, la negociacion... cosas que evidentemente, hay que tener en cuenta y que forman parte de la lucha sindical, pero... ¿es que el sindicalismo ha renunciado total y definitivamente a superar el marco politico y social actual en favor de una democracia auténtica, una democracia popular y republicana en el que la economía esté plenamente socializada y el trabajo de todos no contribuya a engrosar las arcas de un grupo de privilegiados (banqueros, constructores, especuladores, obispos, etc.) , sino que contribuya a crear riqueza para todo el pueblo? ¿todo lo que pueden hacer las centrales sindicales es negociar convenios, reformas sectoriales, parciales? ¿no hay, aunque sea en un horizonte lejano, el objetivo real de que sea la clase trabajadora la que tenga el poder real sobre la economía, la que ejerza el poder?
Y sobre esto, y ent

Ninguna libertad, ningún derecho, ninguna conquista es regalada graciosamente por quienes detentan el poder, sea en el ámbito que sea. En la música y en la cultura, organización, movilización, reivindicación, lucha colectiva... siguen siendo más necesarias que nunca.