Aun ahora, de madrugada, ya con sueño, no puedo reprimir un estremecimiento al volver a escuchar el maravilloso homenaje al pueblo de Chile creado por ese formidable artista cubano, Pablo Milanés, y que mis amigos Reincidentes versionearon con la rabia, el sentimiento y la emoción que les caracteriza. Yo pisaré las calles nuevamente / de lo que fué Santiago ensagrentada / y en una hermosa plaza liberada / me detendré a llorar por los ausentes...
Hoy 11 de septiembre, hay que volver a recordar una vez más el ejemplo de honestidad, de coraje, de valentía y de sinceridad de un hombre, Salvador Allende, que murió defendiendo la independencia, la libertad y la dignidad de su pueblo frente a un hatajo de traidores sin honor ni conciencia vestidos con uniforme militar. Recordar que aquellos golpistas, felpudos rastreros del imperialismo norteamericano llevaron a aquel país a un baño de sangre y de miseria cegados por su ignorancia, su podredumbre moral y su odio emfermo a aquel movimiento social y político que estaba transformando las estructuras injustas y las desigualdades de Chile en favor del progreso, de la cultura y del socialismo.
No olvidar, nunca olvidar al compañero Victor Jara, cantante, artista y poeta ejemplar, comprometido con los ideales de cambio, de progreso, de revolución que fue una de las primeras víctimas de aquel genocidio perpetrado por Pinochet y su rebaño de alimañas asesinas. Recordar siempre como Victor Jara, como ante la muerte, ante la tortura, ante la represión, dió ánimos a todos los detenidos en el Estadio Nacional y supo ser en esas circunstancias un compañero leal, íntegro, valiente, al que los esbirros del dictador asesinaron con un ensañamiento y un sadismo que no cabe en cabeza humana.
Hoy, vuelvo emocionado a escuchar El Derecho de Vivir En Paz, Casitas del Barrio Alto, Ni Chicha ni limóná, Te Recuerdo Amanda, aquel magnífico Son Para Cuba que sus compañeros Quilapayún dedicaron al compañero Fidel Castro, el homenaje de Pablo Milanés y Reincidentes al Chile libre y limpio de Allende y el corrido que a Victor Jara dedicaron otros buenos amigos, los colegas de Ska-P. Releo los poemas del Canto General de Pablo Neruda y tal día como hoy, solo deseo que entre todos, perpetuemos el recuerdo de Victor Jara y Salvador Allende, y que su ejemplo de lucha, de dignidad y de valentía no dejen de inspirarnos en la lucha diaria que cada uno libramos.
Y que también hagamos que la historia condene y repruebe sin paliativos la horrenda masacre que el 11 de septiembre de 1973 iniciaron en Chile unos fanáticos asesisinos, incubados en el fascismo más retrógrado y terrorista.
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Hace 15 horas
1 comentario:
saludos mariano, sigue en la lucha
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